Las mujeres lesbianas, bisexuales, pansexuales y sáficas nos enfrentamos a problemáticas emocionales y sociales muy particulares (como la lesbofobia, la bifobia y la misoginia), que afectan nuestra calidad de vida y requieren de un proceso de terapia específico que tome en cuenta nuestra orientación sexual.
Las mujeres sáficas vivimos procesos, violencias y formas de discriminación muy específicas debido a nuestra orientación sexual, las cuales difieren en muchos sentidos de las que oprimen a mujeres heterosexuales o a otros sectores de la comunidad LGBT+, por lo que mujeres lesbianas, bisexuales y pansexuales tenemos razones específicas que nos llevan a iniciar un proceso de terapia.
En esta nota te mencionamos algunas de las razones por las que a casi todas las mujeres sáficas nos beneficiaría tomar terapia. CONOCE LA HISTORIA DE ANNA FREUD, LA HIJA LESBIANA DEL PSICOANALISTA SIGMUND FREUD.
La autoaceptación es uno de los principales temas que la terapia nos ayuda a resolver a las mujeres sáficas
Uno de los principales obstáculos a los que nos enfrentamos las mujeres sáficas es aceptar nuestra identidad como lesbianas, bisexuales o pansexuales, y en este sentido, la terapia es de gran ayuda.
Cuando estás en esa primera fase de aceptarte a ti misma, hace una diferencia enorme tener a alguien que te guíe en el proceso, que te ayude a descubrir de dónde vienen tus miedos sobre quién eres. Pero, sobre todo, que te ayude a desarrollar herramientas para fortalecerte y empezar a creer y sentirte segura de ti misma.
La terapia también nos ayuda a trabajar el miedo al rechazo
Ahora, puedes sentirte perfectamente segura respecto a quién eres y defender a capa y espada tu identidad, y aún así sentir miedo sobre cuál será la reacción de tu familia y seres queridos respecto a tu orientación sexual.
Por supuesto, siempre esperamos y deseamos que nuestras amistades y familia reaccionen bien. Desafortunadamente, cómo reaccionen no está bajo tu control. Pero lo que sí está es la paz que tú misma puedes darte al respecto.
Y ojo, eso no significa decir: «Bueno, si no te aceptan, que te valga». Sino cambiar tu modo de pensar a que es una situación que no recae en ti. Incluso, si la respuesta de tus seres queridos fuera negativa, tú podrás encontrar la forma de estar tranquila y feliz contigo por vivir la vida que quieres para ti.
Suena más fácil de lo que es, y por eso es que esta es otra de las razones por las que las mujeres sáficas nos beneficiamos tanto de la terapia.
Luchar contra la lesbofobia interiorizada
Existen muchas mujeres que incluso ya reconocidas y aceptadas como mujeres sáficas, por ellas mismas y por sus familias, siguen sintiendo culpa, pena, vergüenza. O les cuesta una energía tremenda cada vez que tienen que contarle sobre su orientación sexual o su novia a alguien nuevo.
No es para menos, la lesbofobia está arrolladoramente extendida en el mundo. Por lo mismo, a veces es mucho pedir para una misma querer resolverlo sola. MIRA CÓMO LUCE LA LESBOFOBIA ENTRE LESBIANAS.
Luchar contra la bifobia interiorizada
Algo parecido sucede con las mujeres bisexuales, que son tanto rechazadas entre las personas heterosexuales como entre las personas LGBT+. Ante esa sensación de no pertenecer en un lado, muchas mujeres bisexuales optan por encajar en uno de ambos grupos, invisibilizándose a sí mismas, lo cual impacta enormemente en su autoestima. ENTÉRATE DE QUE LAS MUJERES BISEXUALES EXISTIMOS Y RESISTIMOS.
La terapia también da herramientas a las mujeres sáficas para enfrentar y combatir la lesbofobia o bifobia en su entorno
Si luchar contra la lesbofobia y bifobia interiorizada ya es un reto grande, hacerlo contra toda la de mundo y nuestro entorno es un reto titánico. ESTOS ‘CUMPLIDOS’ EN REALIDAD SON LESBOFOBIA.
Afortunadamente, la terapia también es un excelente acompañamiento para fortalecerte cuando vives lesbofobia, bifobia o misoginia en la zona donde vives, en tu escuela, en tu trabajo o en tu misma familia. No estás sola.
En terapia puedes desarrollar herramientas que te permitirán poner límites con personas violentas en cualquier contexto donde convivas con ellas. Y que también te ayudarán a reconstruir nuestros círculos sociales para vivir lo más lesbobimisoginia free posible. MIRA CÓMO RESPONDER A COMENTARIOS LESBOFÓBICOS.
La terapia también permite a mujeres lesbianas, bisexuales y pansexuales deconstruir la heteronorma en sus relaciones
Al vivir en un sistema heteropatriarcal, sería utópico pensar que las mujeres sáficas no tenemos comportamientos misóginos y hasta lesbobifóbicos solo por el hecho de amar a otras mujeres. La terapia nos permite identificar, reconocer, cuestionar y, finalmente, deconstruir esos patrones heteropatriarcales que seguimos y que nos violentan y nos hacen violentar a otras y que a veces no nos damos cuenta.
Un ejemplo interesante son los roles sexuales en las relaciones sáficas, en los que se hace una división tajante en la que una debe cumplir con un rol sumiso, mientras que otra cumple con uno dominante. En muchas ocasiones, esta dinámica ni siquiera sigue los deseos de las mujeres que participan, solo se da por hecho.
Hacer uso del proceso terapéutico para analizar cómo somos en nuestras relaciones y qué nos hace actuar de una forma u otra es el inicio para empezar a construir relaciones más sanas. DESCUBRE QUE EL ACOSO ENTRE LESBIANAS EXISTE Y CÓMO FRENARLO.
La terapia nos ayuda también a enfrentar la lesbofobia y la misoginia sin dejarnos vencer
Otra de las maravillas de la terapia es que no solo nos ayuda a darnos paz a nosotras mismas respecto a nuestras parejas, familia y círculos cercanos. Es incluso un pilar en el cual recargarte cuando te sientes rebasada de todo lo que pasa en el mundo. Yo, personalmente, he tenido sesiones en las que no hablo necesariamente de mi vida, pero sí de lo devastador que se siente vivir en un país y mundo lesbobifóbico, misógino y feminicida.
Incluso si no vives una lesbobifobia latente y violenta como viven otras mujeres, saber que otras están pasando por ello nos desilusiona y lastima a niveles en los que, por nosotras mismas, no podemos salir de esa espiral de furia, enojo e indignación. Especialmente le ocurre a aquellas que hacen activismo por las mujeres o por las mujeres sáficas y la comunidad LGBT+.
En estos casos, la terapia también es un espacio para desahogarnos y recuperar perspectiva para poder seguir luchando contra la lesbobifobia y misoginia sin querer darnos por vencidas. TE EXPLICAMOS POR QUÉ EL FEMINISMO NECESITA A LAS MUJERES SÁFICAS.
Como puedes ver, querida lectora, hay muchas experiencias que nos atraviesan de forma particular a las mujeres sáficas y con las que no siempre podemos solas. Ni tendríamos por qué poder solas, la verdad. Pero, afortunadamente, existe la terapia. ESTAS SON ALGUNAS COSAS QUE DEBES SABER SOBRE LAS MUJERES SÁFICAS.