Las mujeres sáficas sienten amor y atracción por otras mujeres, independientemente de su orientación sexual —lesbianas, bisexuales, pansexuales— o de su identidad de género —cis o trans—.
Para hablar sobre mujeres trans sáficas, primero debemos abordar el término ‘safismo‘, el cual se originó en la antigua Grecia, en la isla de Lesbos, donde vivía la poetisa Safo de Lesbos, también conocida como Safo de Mitilene. Ella se convirtió en un símbolo de la pasión femenina. Sin embargo, a lo largo del tiempo, dicho concepto ha sido utilizado de diversas maneras y con diferentes connotaciones.
En su forma más amplia, el safismo no se limita únicamente a la atracción sexual. También puede implicar un profundo vínculo emocional, compañerismo y amor romántico entre mujeres.
Dicho de este modo, ser una mujer sáfica implica reconocer y validar la diversidad y complejidad de las relaciones y experiencias amorosas entre morras, sin limitarse a categorías estrictas de la orientación sexual.
¿Para qué transicionar si eres una mujer trans y te atraen las chicas?
Esa es una pregunta recurrente que me hacen. Muchas veces, algunas personas tienen la idea de que los genitales deben determinar tu identidad de género, tu expresión de género y, por lo tanto, también tu orientación. ESTAS SON TODAS LAS COSAS QUE DEBES SABER SOBRE LAS MUJERES SÁFICAS.
De manera bastante frecuente, debo explicar que ninguna de esas variables tiene que estar vinculada o ser dependiente una de la otra. Tú puedes tener cierta genitalidad, y de eso no dependerá de quién te enamores.
Y aquí es donde cobra sentido la respuesta: la orientación sexual no es algo que se decida, solo está y listo. Por ejemplo, en mi experiencia, jamás me he sentido atraída por los chicos (independientemente de la genitalidad). Entonces, una cosa es cómo me identifico (como mujer) y otra la atracción afectiva, sexual y genital que pueda tener. CONOCE LAS DIFERENCIAS ENTRE ORIENTACIÓN SEXUAL E IDENTIDAD DE GÉNERO.
Entonces sí, las mujeres trans sáficas existen porque su interés y atracción puede ser también por otras mujeres. No importa que se identifiquen como lesbianas, bisexuales, pansexuales, etc.
¿Qué retos enfrentamos las mujeres trans sáficas?
En primera instancia, el rechazo por desconocimiento. Para muchas personas, no tiene sentido que una mujer trans sea otra cosa que heterosexual. Pero al menos, con base en mi experiencia y la de la mayoría de las chicas trans que conozco, me han manifestado identificarse como sáficas (lesbianas, bisexuales o pansexuales), contrario a lo que se piensa de que nos atraen exclusivamente los hombres. Curiosamente, no hay muchos datos sobre esto. CONOCE CUÁL ES LA BANDERA SÁFICA.
Luego viene el tema de encontrar pareja. Esto resulta ser uno de los principales retos que vivimos las mujeres trans. Pocas veces somos objeto de deseo de otras chicas, debido a que no solo basta con encontrar una morra sáfica, sino también una que no tenga prejuicios por la genitalidad que presentamos.
Otro de los retos es que muchas veces somos vistas como trofeo dentro de las experiencias sexuales de las personas. Asimismo, somos como la sticker cromada del álbum de estampitas en la colección de muchas personas, denotado con frases como: «Yo jamás había estado con una como tú» o «Ya solo me falta estar con una mujer trans».
¿Qué es lo bonito de ser una mujer sáfica trans?
Que puedes ser tú al 100% y también compartir tu vida con alguien que te atraiga sexual y afectivamente. En mi caso, ha sido un viaje muy interesante. Muy retador, lo reconozco. Pero hoy, al llevar varios años de reconocerme como mujer trans sáfica, puedo decir que estar con mi esposa ha sido de las cosas más geniales de mi vida. Sé que juntas siempre podremos salir adelante.
Y creo que de eso se trata sabernos morras sáficas: que el amor es distinto, más intenso. Tal vez por eso nos vamos a vivir juntas a los pocos meses. O tal vez somos más auténticas, no lo sé. Hablo solo de mi experiencia, pero incluso hasta con amigas, jamás me sentí más cómoda e incluida que con mis amigas las morras sáficas.
El mundo es más bonito con mujeres que nos amamos a nosotras mismas, que nos cuidamos y respetamos.