Todas hemos vivido amistades incómodas. Pero, ¿sabemos identificarlas? Y más importante, ¿qué hacer con ellas? Conoce los tipos más comunes entre mujeres sáficas y qué hacer si tú o tu pareja tienen alguna.
Si bien les amigues hacen de la vida una experiencia más bonita y significativa, existen también ciertos tipos de amistades incómodas que pueden hacer nuestra existencia algo más retadora.
Hoy vamos a hablar precisamente de esas, específicamente de ciertos tipos que, por razones misteriosas del Señor, se repiten con más frecuencia entre las mujeres sáficas. No lo digo yo, lo dice la ciencia… y Twitter. (Obviamente las amistades touchy vienen incluidas en esta lista).
Pero no solo identificaremos los tipos de amistades incómodas más comunes entre las mujeres sáficas. Sino también qué hacer si tú o tu novia tienen alguna de ellas.
Así que agárrense bien de su silla, asiento del metro, camita o de donde quiera que nos estén leyendo. Porque este viaje a las vertiginosas dinámicas de amistad entre ser humane y ser humane empieza ya.
Amistades lesbofóbicas o bifóbicas
¿Qué pensaron? ¿Que iba a empezar con la amistad chapulina que nomás anda viendo con quién traes ligue para ir a lanzarle la polaina? No, reinas. Y sí está en la lista, pero esa se identifica rápido y así de rápida es su solución.
El primer lugar va para un tipo específico de amistad incómoda que nos afecta particularmente a las mujeres LBTQ+: las amistades bifóbicas o lesbofóbicas. CHECA CÓMO SE VE LA LESBOFOBIA ENTRE LESBIANAS.
El nivel de bifobia o lesbofobia puede variar y, con él, la estrategia que tomes para continuar o dejar ir ese vínculo, lo cual no es nada fácil.
Está la amistad que es flagrantemente lesbofóbica y que no detiene sus comentarios ni se replantea por qué piensa así, ni siquiera sabiendo que eso te daña a ti. Caso en el cual lo más recomendable, y a veces hasta obvio, es alejarse.
¿Qué hacer en caso de tener amistades lesbofóbicas o bifóbicas?
Pero luego hay formas de bifobia y lesbofobia más sutiles, que hacen muy difícil saber qué hacer. Se trata de amistades que supuestamente te aceptan, pero te tratan diferente desde que les contaste que te gustaban las mujeres. MIRA LA RESPUESTA A COMENTARIOS LESBOFÓBICOS DURANTE LAS REUNIONES FAMILIARES.
O que aparentemente todo bien contigo, pero cuando tienes pareja y conviven con ella, se portan distinto a como se portan con las parejas heterosexuales de otras amistades.
Ojo, que la bifobia también puede venir en el caso inverso desde amistades LGBT+ hacia ti o tu pareja si estás con alguien del género opuesto. ESTOS SON ALGUNOS MOMENTOS INCÓMODOS QUE PUEDE VIVIR UNA MUJER BISEXUAL CON SUS AMIGAS LESBIANAS.
O a lo mejor a ti, y a tu pareja si tienes una, te tratan bonito y maravilloso. Pero aun así critican a otras personas por ser LGBT+ o siguen haciendo comentarios LGBTfóbicos porque en realidad siguen siendo LGBTfóbicos.
En esos casos, depende de ti hacer lo que te dé más paz: si dejas ir a esa amistad, o intentas trabajarla. También recordemos que muchas personas son LGBTfóbicas por prejuicios enseñados y, aunque no es en lo absoluto nuestro deber, si queremos podemos intentar hacerles cambiar esa percepción errónea.
Lo anterior se logra con información, paciencia y esfuerzo. Pero, otra vez, dependerá totalmente de lo que quieras y sientas que necesitas para ti. No le debes nada a nadie. Pero tampoco está mal si quieres hacer el intento de sensibilizar a otras personas. Lo que sientas que te va a funcionar a ti, eso es.
La que tiene sentimientos ocultos
Esa amiga, amigo o amigue que está enamorade de ti y no lo dice, pero se sabe. O a lo mejor no se sabe, pero el hecho de que esos sentimientos existan complica la amistad si no son correspondidos por ti.
Esto definitivamente puede convertirse en una situación muy incómoda si tú estás en una relación, pues te afecta tanto a ti y a tu pareja como a tu amigue.
¿Qué hacer? Si tú eres la amiga con sentimientos ocultos, platícalos. Yo sé que el miedo al rechazo o a perder a tu amigue son inmensos. Pero por esa misma razón, tu mejor posibilidad es ser lo más honesta que puedas y solo hablar de lo que sientes.
No le pongas encima a la otra persona la expectativa de corresponderte. Simplemente dile: «Me siento tal y tal respecto a ti y me gustaría platicarlo contigo porque no quiero que afecte nuestra amistad, pero no puedo evitar sentir esto».
¿Cómo tratar a una amistad que está enamorada de ti?
Si es tu amigue quien tiene sentimientos hacia ti: trátale con amorcito, comprensión y escucha lo que tiene para decirte sin asustarte y querer huir si no sientes lo mismo. Ahora, si esa persona no lo platica contigo, pero sientes que hay un rollo de ese estilo sucediendo entre les dos, saca el tema tú.
Con toda la empatía que puedas, dile lo que percibes, pregúntale si tiene sentido para elle, explícale tu posición al respecto. Y delimiten un plan de acción sobre qué pueden hacer para superar esos sentimientos y seguir con su amistad.
Si tu novia tiene une amigue enamorade de ella: háblalo con tu novia, pero bien armada de honestidad y toda la asertividad de la que puedas hacer uso, mi estimada. Porque muchas veces nuestra reacción en estos casos es completamente polar.
O armamos un drama gigantesco que pudo haber sido una plática y oportunidad para trabajar temas así con tu novia. O nos guardamos la molestia para no espantar, molestar o ‘perder’ el vínculo. Ninguna de las dos son opciones sanas.
Lo mejor es platicar con tu novia, decirle lo que percibes, cómo te hace sentir eso. Y platicar ambas de la situación.
Si ella no se había dado cuenta, puede ser una oportunidad para que lo hable con su amiga y ambas lo trasciendan. Pero ojo, si ya se había dado cuenta y simplemente estaba ignorando la situación, pon tus límites.
Así como sería injusto pedirle que termine una amistad porque te genere inseguridad, es injusto también que no resuelva una situación incómoda que pondría insegura a cualquiera. Las claves son la honestidad y los acuerdos.
La que no comprende las señales
Ahora, también sucede que ya se habló el tema con la amiga y aun así su ‘esperanzado’ corazón le dice: «Ay, ‘no’ significa ‘chance y un día’». Y no, reinas. No es no.
Si ya se estableció que los sentires no son recíprocos y nada va a pasar ahí, hay que respetar. Si tu amiga, amigo o amigue sigue teniendo avances contigo o comportamientos extraños, vuelve a platicar con elle.
Y si aun así no se resuelve, a lo mejor es momento de poner tu distancia porque si no, nos enfrentamos con el siguiente punto.
La amistad que cruza límites (físicos o emocionales)
Es la que hace comentarios fuera de lugar y avances hacia ti. O bien, que tiene actitudes negativas hacia tu novia, si estás en una relación. Este tipo de personas son no solo una de las amistades más incómodas, sino más tóxicas de la lista.
Porque pasan de largo de todo el concepto de consentimiento y actúan desde un lugar egoísta y violento al no respetar el límite que pusiste.
En esos casos, lo mejor es alejarte de esa persona. Suena terrible dejar amigues, pero es más terrible normalizar el acoso. Porque eso es, queridas lectoras: acoso. EL ACOSO ENTRE MUJERES SÁFICAS TAMBIÉN EXISTE, APRENDE A IDENTIFICARLO Y FRENARLO.
Le ex de tu novia, o la persona que antes le gustaba a tu novia
Ah, se trata de las amistades más incómodas por excelencia que nuestra novia podría tener. Esa amiga con la que tu actual amorcito tenía un crush, ligó en Bumble o, peor aún, la ex con la que terminó de amix.
Aquí hay que ser inteligente, observadora, objetiva y práctica, mis queridas. Y poner mucha atención en si, verdaderamente, los sentimientos ya quedaron en el pasado, Hakuna Matata y todas amigas felices. O si todavía hay por ahí cosillas raras.
No es imposible que alguien pueda superar el crush o la relación que pudo haber tenido con otra persona, y que esos sentimientos y amor se conviertan en otra cosa, en otro tipo de vínculo.
En ese caso, si confías en tu novia y en que verdaderamente solo ve a esos seres como amigas, vive sin preocupación. Es normal que sientas celos e inseguridad, pero si lo platicas con tu novia todas las veces que lo necesites, te prometo que van desapareciendo.
Sin embargo, si tu intuición te dice que algo está raro ahí, y aparte de tu intuición hay detalles que te hacen pensar que los sentimientos de tu novia por esa persona no están superados, la estrategia cambia.
En ese caso, lo mejor sería confrontar a tu novia, decirle qué es lo que percibes, preguntarle si es real, qué siente ella al respecto. Y con base en eso, puedes ver si es algo que quieres y estás dispuesta a trabajar, o si prefieres terminar esa relación. Solo procura siempre recordarte a ti misma qué quieres y qué no quieres para ti. CHECA LOS TIPOS DE EX QUE CASI TODA CHICA LESBIANA TIENE.
Las amistades touchy
Un escenario completamente diferente es cuando une amigue tiene avances contigo y tú los correspondes. Si estás en soltería, todo bien y ya después ustedes verán si se queda en agarrón casual entre amix o si escala a otra cosa.
Pero si estás en una relación monógama, agarrarte con cualquier persona y, especialmente, une amigue, es un acto de traición horroroso.
Si es tu novia la que muestra señales de tener ese tipo de dinámicas, huye. Nadie se merece eso. Es mejor dejar ir a esa persona que estar con alguien que no tiene ningún reparo para lastimarte o romper sus acuerdos contigo.
Otro tipo de amistades incómodas son las competitivas
Se trata de vínculos donde hay un sentido de competencia o hasta rivalidad, ya se entre las dos personas o de una hacia otra. Puede ser por atención, por éxitos personales, profesionales, por otra persona, o una infinidad de motivos.
Pero al final, ese sentido de competencia puede generar incomodidad, tensión y afectar la amistad.
¿Qué hacer? Si eres tú la que se siente así respecto a otra amiga, trata de evitar compararte con ella. En vez de alimentar los sentimientos de envidia por lo que hace o lo que tiene, tómala como inspiración para lograr lo que tú quieres para ti.
Si es una amiga tuya la que tiene comportamientos así contigo, intenta platicarlo con ella. Tal vez de una forma un tanto sutil como: «Oye, te siento así y asado conmigo, ¿tiene sentido para ti? ¿Qué pasa?».
Si no se abre a la conversación y si los comportamientos siguen, alejarse un poco también es un ejercicio de cuidado mental, y a veces lo olvidamos. Es así especialmente en relaciones de amistad poco sanas. No significa dejar ese vínculo si no quieres, solo no exponerte a una dinámica negativa para ti.
La chapulina, una de las amistades incómodas más frecuente en los círculos lésbicos
De entre las amistades incómodas, la más. Son esos seres horrorosos que van como hienas detrás de tu ex novie o ligue en cuanto terminan, o peor aún, cuando siguen juntes.
Porque no, amigas. Una cosa es que te hayas enamorado irremediablemente del o la ex de tu amiga y platiques con ella sobre eso.
Y otra es el patrón compulsivo de ir detrás de cada persona con la que tus amigas tienen o tuvieron algo, como si tú no tuvieras capacidad de agencia para conocer gente por ti misma. Amistades así, la verdad, esta lesbiana sugiere no tener. EVITA COMETER ESTE TIPO DE HORRORES LEYENDO NUESTRO CÓDIGO DE HONOR DE LAS MUJERES SÁFICAS.
Las amistades con diferentes niveles de ‘intensidad emocional’
Otro caso en el que la amistad puede volverse incómoda es cuando alguna de las partes ‘invierte’ un nivel de energía emocional diferente. A veces se siente como si una le echara más ganitas a la amistad y otra no tanto. Y a veces es así, pero otras veces también se debe a las personalidades de cada una.
Hay personas un poco más solitarias, pero que aman y adoran a sus amigues y se mantienen como vínculos importantísimos aunque se vean tres veces al año. Y otras que se sienten más plenas en su amistad con salidas y conversaciones más frecuentes.
Ambos casos son válidos y, otra vez, la solución está en hacer acuerdos y encontrar puntos medios. Platiquen qué esperan y quisieran de su amistad, y ver qué cosas puede hacer cada una para ambas sentirse bien, sin que eso implique poner su personalidad a un lado.
Las amistades posesivas
Otro tipo de amistad incómoda, tanto si estás soltera como en pareja, es la posesiva. No se trata necesariamente de amistades que estén enamoradas o se sientan atraídas hacia la amiga que posesionan. Es más bien que la ven de forma inconsciente como un recurso y la atesoran como tal, a veces en manifestaciones poco sanas.
Este tipo de dinámicas pueden suceder por muchas cosas. Desde la cercanía originada por el mismo vínculo, o cuando alguna o ambas de las partes ven en la otra un espacio seguro que no encuentran en otros sitios.
Sin embargo, tener dinámicas de posesión y exigencia hacia cualquier persona conlleva situaciones negativas que afectan la vida de ambas. Y de terceres cuando alguna inicia una relación y la otra persona empieza a experimentar celos del nuevo vínculo que su amiga está formando.
Si sientes que tienes una amistad que es posesiva contigo, recomendamos platicarlo con ella. Empieza a abordar el tema y también pon límites en la relación. No se trata de dejar el vínculo, sino de hacer acuerdos para cuidar y respetar la individualidad, la vida, las decisiones, las necesidades y los deseos de cada una.
Por otro lado, si sientes que eres tú quien tiene rasgos o actitudes posesivas con tus amigues, haz un ejercicio de reflexión sobre por qué lo haces. Qué huequitos o vacíos llena sentir control sobre elles, y piensa qué cosas puedes hacer tú para llenarlos por y para ti misma.
Tus relaciones de amistad y contigo misma mejorarán muchísimo.
Las que se transforman en triángulos amorosos, una de las amistades incómodas más retadoras si tienes una relación
No es necesariamente en el sentido poliamoroso de gustarse entre todas, sino se trata de esas amistades que son tan cercanas que, incluso en salidas de pareja, ahí están.
No sé a qué se deba, pero sucede con una frecuencia tremenda. Dos personas son muy amigas y, cuando una de ellas empieza una relación, ahora las tres personas empiezan a pasar tiempo, demasiado tiempo, juntas.
Puede o no ser incómodo, dependiendo de cómo se sientan todes sus integrantes. Si tu novia, novio o novie tiene un vínculo así y te hace sentir incómoda, siéntete libre de hablarlo. Otra vez, con asertividad.
No estás mal por sentirte incómoda si en vez de tener tiempo de pareja, tienes tiempo de pareja más su amigue plus one. Ni es necesario que haya una tensión sexual rara entre tu pareja y su amigue para que te sientas con la libertad de poner límites en una situación que no te hace sentir bien.
Con el hecho de que lo sientas necesario, es razón suficiente para platicarlo y, al contrario, puede mejorar la dinámica para todes.
Esperamos que esta nota les sea de utilidad y, si se encuentran en una situación así, les ayude a salir victoriosas de ella.